jueves, 8 de octubre de 2009

Vino y Corazón


De acuerdo a la tradición, el vino es una bebida milenaria que en las épocas navideñas se utiliza con una mayor frecuencia en las reuniones, y con las comidas. Pero cual es el vino que debemos consumir, y más, pensando en nuestra salud cardiovascular?
Doctor, me puedo tomar un vinito de vez en cuando?....
Esta es una pregunta frecuente que nos hacen los pacientes, o sus esposas cuando van a consulta.
Hoy en día se sabe que el alcohol es un buen ayudante para nuestra salud, especialmente para el corazón. Pero también sabemos que el alcohol está implicado en una gran parte en los accidentes de tránsito. El alcohol contribuye a enfermedades del hígado, diversas variedades de cáncer, hipertensión arterial, derrames cerebrales, y a un debilitamiento progresivo del músculo cardíaco.
EL alcohol consumido con moderación es bueno probablemente para muchas personas. Un trago antes de la comida ayuda a relajarse después de un día estresado; el trago ocasional con los amigos puede ser un tónico social. Estos efectos tanto físicos como psicológicos pueden mejorar la salud y el sentirse bien.
Es clara la evidencia que el consumo moderado de alcohol protege contra la enfermedad coronaria y contra los accidentes cerebrovasculares isquémicos (obstrucción de una arteria del cerebro)
Los franceses de mediana edad que han sufrido un ataque cardíaco y beben dos o más vasos de vino regularmente, tienen el 50 por ciento menos de probabilidad, que quienes no beben, de experimentar un segundo ataque cardíaco.
En Europa, y especialmente en Francia, se ha visto que el consumo de grasas saturadas (provenientes de animales) es de 3 veces más que el de los americanos, así como el hábito del cigarrillo es mayor que en Estados Unidos, sin embargo tienen 3 veces menos enfermedades del corazón. Por que? Esto es una paradoja. Y una de las explicaciones es que el hábito de tomar vino con las comidas, en especial el vino tinto, ayuda a proteger el corazón
El alcohol aumenta el nivel de las lipoproteinas de alta densidad (HDL), que son buenas para el corazón. Pero aunque el alcohol en general (con prudencia por supuesto) disminuye el riesgo de enfermedades del corazón y arterias, el vino tinto es el mejor.


La terapia musical reduce la presión sanguínea y otros problemas relacionados con el síndrome coronario agudo.



Barcelona, España — Siempre se ha dicho que la música es buena para el alma, ahora también se le puede asociar con beneficios concretos a nivel cardiovascular. En efecto, los investigadores que presentaron sus resultados, en el Congreso 2009 de la Sociedad Europea de Cardiología, muestran que la terapia musical, reduce la presión sanguínea, el ritmo cardiaco y el nivel de ansiedad de los pacientes [7].El Dr. Predrag Mitrovic (Universidad de Belgrado, Serbia), investigador principal de un estudio sobre este tema, dijo a heartwire que estudios previos habían mostrado que la terapia musical tiene un efecto positivo sobre el corazón disminuyendo la actividad del sistema nervioso simpático